
Copyright RAÚL BARCELOS
Luxury Avenue
Cada cuatro o cinco viajes suelo parar. Ya sé que eso te molesta Barcelos porque no puedo atender tus "deseos"; pero ya me conoces. Yo paro y tu arrancas. Me recibes con algo oscuro, tan lejano a lo que conozco de ti, que me resulta muy familiar. No puedo dejar de pensar que en todo este tiempo de reflexión he conocido mucha gente. Pero toda era falsa. Aquella que sonreía era hipócrita. Porque en el dolor no se sonríe, se llora. Me gusta perderme y que me encuentren cuando me dé la gana. Soy así, autoritariamente flexible, incongruentemente perdida. Te recomiendo un viaje por aquí. Te daré la coña infinita. Recuerdo una mañana por la Luxury Avenue; casas, tiendas, ropa, miradas. ¿Recuerdas la foto que te mandé? 5 de la tarde, 40 grados a la sombra..., me tiré al suelo, miré, y lo que me mandas me recuerda a la Luxury Ave. Negro, tardes negras.
Te llamo.
Nandy